Nicola Kuhn ya está en la Caja Mágica. A sus 19 años, el alicantino de origen austriaco-alemán es el presente y futuro del tenis español y está con ganas de demostrarlo. Y qué mejor forma de hacerlo que en Madrid y ante su público. Tras recibir una invitación, el No. 260 del mundo disputará por segundo año consecutivo la fase previa del Mutua Madrid Open.
Un premio, sin duda, a una trayectoria prometedora, ascendente y solo quebrada (parcialmente) por las lesiones. No obstante, una recompensa revestida de oportunidad única para dar ese salto cualitativo y cuantitativo que tanto se espera de él. Por tanto, y sin un ápice de demora, el español se ha puesto manos a la obra. Nada más aterrizar este jueves en la capital española, se ha dirigido a las instalaciones del torneo madrileño para entrenar. Lo ha hecho en la Pista 19 acompañado del georgiano Nikoloz Basilashvili, No. 17 del mundo.
Tras conseguir su segunda victoria en el ATP Tour la pasada semana en Barcelona, Kuhn llega a Madrid con sensaciones nuevas y renovadas. “Fue un gran partido (en Barcelona). Necesitaba una victoria como esta, sentir que después de la lesión puedo ganar a jugadores Top 100. He demostrado un gran nivel esos dos días que jugué. Estoy ilusionado de poder volver a Madrid y dar mi mejor nivel”, explica el No. 260 del mundo.
El año pasado no superó la fase previa, por lo que este año buscará su primera presencia en el cuadro principal masculino del Mutua Madrid Open. Una situación que no resultaría nueva para el alicantino tras su presencia en el maindraw del Masters 1000 de Miami este año. “Mi único objetivo aquí es disfrutar y dar lo máximo de mí, hacer lo que he venido haciendo estas últimas semanas y ver hasta dónde llego. Esto es un Masters 1000 y todos son mejor que yo. No tengo presión. Juego delante de mi afición y me motiva mucho”, asegura.
Sólo el tiempo dirá si esta promesa se convierte en realidad, pero los precedentes prometen… y mucho. Con los títulos de campeón del mundo y de Europa alevín y el MVP en la Copa Davis Junior bajo el brazo, su explosión definitiva llegó en 2017. Consiguió sus primeros títulos en el circuito junior, batiendo récords de precocidad y ascendiendo como la espuma en el ranking ATP. Alcanzó el puesto 196 del mundo, pero como ascendió, cayó. 2018 condenó a Kuhn al averno del tenis y vio cortada su progresión de cuajo. Tocaba volver al barro y combatir más duro si cabe para redirigir su carrera deportiva. Y en eso se encuentra.
“Me gustaría verme en el Top 100. Creo que es un objetivo que puedo cumplir antes o después, pero la pregunta es cuánto tiempo tardaré en sacar lo mejor de mí y poder dar ese salto esperado”. concluye el alicantino, que encara este 2019 con ese objetivo de meterse entre los 100 mejores jugadores del mundo para, por tanto, poder demostrar quién es en los torneos más importantes del ATP Tour.
¿Veremos a Nicola Kuhn regresar a Madrid el año que viene con el rango de Top 100?