Rafael Nadal y Carlos Alcaraz disputarán este miércoles un partido muy especial en el Mutua Madrid Open. Sobre la tierra batida de la Caja Mágica, en el escenario más imponente del país, dos generaciones del tenis español cruzarán golpes en un duelo inolvidable. En el 18º cumpleaños del murciano, el gran exponente de la nueva generación, se vivirá un momento único ante las gradas del Estadio Manolo Santana.
Será un choque con un aroma histórico. Desde los banquillos observarán los dos primeros No. 1 en la historia del tenis español. Carlos Moyà, entrenador del campeón de 20 Grand Slam, y Juan Carlos Ferrero, técnico de uno de los mayores talentos jóvenes del circuito, desgranan un encuentro tan como pero esperado.
“Va a ser un partido especial”, reconoce Moyà. “Se enfrentan el presente, porque Rafa es todavía el presente y por muchos años, y el futuro inmediato. Creo que Alcaraz va a ser un gran jugador. Ya es muy bueno, aunque todavía le falta esa experiencia y está en proceso de ir creciendo. Es un relevo generacional natural”, apunta el mallorquín.
“Para mí es un duelo generacional”, matiza Ferrero, siempre prudente al guiar a Carlos. “Rafa está super vivo, está jugando a un nivel altísimo, peleando por Grand Slams. No me atrevería a hablar de relevo. Es verdad que Carlos es el chico que viene por detrás, no para sustituir, sino para optar a grandes cosas y hacer grandes partidos. Todo lo que se habla de Carlos como relevo de Rafa creo que no es algo bueno para él. Es una presión añadida que se le pone ahí. No sirve demasiado. Me gusta pensar que tenemos otro jugador que tiene mucho potencial. Con su juego y su forma de afrontar el partido a partido, el cara a cara con los jugadores, me hace confiar en que va a ser muy bueno. Pero hay que ir paso a paso. Mañana es un duelo generacional”.
¿Cómo se afronta un partido así? ¿Cómo se plantea el reto? ¿De qué manera se preparan las dificultades que puede crear un joven con hambre infinito?
“Sales con todas las alarmas puestas”, reconoce Ferrero, que en su día asistió a la llegada de Nadal al circuito. “Rafa ya conoce a Carlos porque entrenamos juntos en Australia. Tuvo esa oportunidad y jugar un set y medio. Sabe que Carlos es peligroso, sabe que tiene que salir con todo”, indica el valenciano. “Cualquier jugador que está en activo y ve venir a un jugador con proyección, ya lo conoce, lo estudia. Tú sabes que es peligroso, pero también confías en ti mismo. Rafa tiene experiencia más que suficiente para saber cómo tiene que jugar. Obviamente pensará que Carlos es peligroso, pero es un partido más para él”.
Moyà vivió en sus propias carnes la llegada de la savia nueva. En su primer partido duelo directo, sobre la arcilla de Umag 2003, Rafa le sorprendió teniendo apenas 17 años. Aunque el mallorquín establece diferencias claras entre ambas situaciones, dibuja un perfil interesante.
“Yo no era Rafa, en el sentido de que no tenía 20 Grand Slams, no tenía su ambición, su calidad ni su nivel. Y Rafa era más joven todavía de lo que es Alcaraz. Había una diferencia importante, yo conocía mucho a Rafa, habíamos entrenado mucho juntos,…” recuerda. “El respeto que quizá le tenga Alcaraz a Rafa, al no haber compartido muchas cosas, de no tener contacto con él, ese respeto Rafa no lo tenía por mí. Compartíamos muchas cosas y ese respeto creo que se pierde un poco, al convivir con alguien, al conocerle tanto. Pero son partidos especiales para los dos. Son partido especiales en los que hay un extra de presión para ambos, y el que la maneje mejor se llevará el partido”.
El horizonte presenta un encuentro delicioso en Madrid. La afición siempre ha arropado a Nadal en la Caja Mágica como a un hijo, y está preparada para abrazar con cariño la figura de Alcaraz. Será una oportunidad para disfrutar de un momento especial, cuyo significado solamente conoceremos con el paso de los años.
“Rafa no va a durar para siempre, lamentablemente es ley de vida”, reconoce Moyà. “En unos años creo que Carlos va a ser uno de los jugadores que van a estar luchando por ganar Grand Slam. A lo mejor se enfrentan en alguna final de un gran torneo. A Rafa le quedan años de un nivel muy alto y Carlos en uno o dos años puede estar perfectamente para luchar por esos torneos. Pero estamos en 2021, en estos momentos Rafa todavía tiene esa experiencia y ese nivel que creemos que es válido para luchar por cualquier torneo”, añadió el balear.
“Sabemos que Rafa en tierra es prácticamente invencible, pero el mayor reto va a ser intentar estar estable mentalmente todo el tiempo”, destaca Ferrero, poniendo deberes en las manos de su pupilo. “Creo que eso mañana tiene que ser su mayor virtud. Ya sabemos que Rafa juega absolutamente cada punto. Los jóvenes eso es lo que más les cuesta, estar 100% concentrados de manera permanente. Para él es una gran motivación hacerlo aquí en casa, su familia está aquí y no le ven jugar desde hace mucho tiempo. Está con muchas ganas”.