Antes de competir sobre la tierra batida de la Caja Mágica, Rafael Nadal dio la bienvenida al Mutua Madrid Open 2021 de una manera muy especial. El cinco veces campeón participó este jueves en una charla virtual conducida por Rafael Plaza y Antonio Arenas y a la que también asistió Feliciano López, director del ATP Masters 1000 madrileño.
El principal representante del tenis español repasó multitud de temas antes de ajustarse las zapatillas para competir en el polvo de ladrillo. Convertido en esta edición en el jugador con más participaciones en el torneo, con 18 presencias en el cuadro final, Nadal echó la mirada atrás para recordar su momento más especial en el evento. Y la memoria le llevó al primer eslabón de esta larga cadena.
“El primero, que fue en 2005”, recordó haciendo referencia a la épica final disputada ante Ivan Ljubicic, donde levantó dos mangas antes de hacerse con el título. “Fue la final, aunque no fuera en tierra. Fue un partido inolvidable, muy emocionante, donde recuerdo que el publico estuvo increíble. El partido me costó unos cuantos meses de carrera deportiva. Me rompí el pie pero valió la pena. Valió la pena la emoción que viví, eso lo hizo imposible de olvidar. Al día siguiente me levanté cojo, no podía ni andar. El público estaba muy cerca, al estar cubierto todo se oye más. Fue una pasada poder ganar en casa de esa manera, ademas siendo yo muy jovencito”.
Con una vida empleada en el circuito, Balear y toledano pudieron recordar sus mejores momentos juntos alrededor del mundo. La mirada de Nadal se dirigió a instantes que han quedado grabados en su retina en compañía del manchego.
“La última Davis en Sevilla fue muy especial. También el partido de semifinales de la última Copa Davis en Madrid”, recordó Nadal, que formó pareja con López en la Caja Mágica camino de la última Ensaladera del tenis español. “Hemos vivido muchos momentos. Por encima de otros momentos, esa semifinal contra Gran Bretaña fue importante para los dos porque nos permitió añadir algo importante a nuestras carreras”.
En un ambiente distendido, Nadal reflexionó sobre la relación entre los jugadores en el circuito, indicando el cambio que ha experimentado el vestuario en los últimos tiempos.
“Antes convivíamos más juntos. Cuando llegué al circuito estábamos más juntos los españoles. Al no haber tanto internet, hacía que saliéramos más juntos. Quizás por eso siempre tuve más relación con los jugadores más antiguos”, explicó el balear. “A día de hoy, tengo una buena relación con todos los españoles, especialmente con Marc, Feli, Andújar, Roberto,… Me llevo muy bien con todos. Y de extranjeros tengo buena relación con thiem, con Federer también. En general, tengo buena relación con todos, pero nos hacemos más entre nosotros los españoles. Años atrás cuando se retiró Pico, Zabaleta,… con todos ellos pasábamos más tiempo juntos”.
Por encima de todo, la mirada está puesta en la competición que arranca este fin de semana en Madrid. En la Caja Mágica, donde ya se respira un ambiente total de ATP Masters 1000, Nadal se prepara para reencontrarse con un público que le arropa como en ningún otro lugar del mundo.
“Madrid es único. Siempre ha sido único lo que he sentido al jugar en Madrid. Creo que este año va a serlo más que nunca. Aunque va a haber un 40% de público, comparando con lo que venimos teniendo será una pasada. Esperamos que el público venga con las mismas ganas de animar que las que tenemos nosotros de jugar”, indicó Nadal, que desde este viernes comenzará sus entrenamientos en la Caja Mágica.
“Espero estar preparado para competir bien y dar el nivel que necesito para jugar los máximos días posibles delante de nuestro público. Mañana voy a empezar la preparación real. Tengo doble sesión los próximos tres días. Me voy a preparar al máximo como siempre».